miércoles, noviembre 28

Sara (Capítulo 23)


Subí las escaleras abrazada a Harry y antes de entrar en mi habitación, miré a Laura y le dedique una sonrisa de buenas noches. Entre en mi habitación y fui en busca de mi pijama, no lo encontraba así que me adueñe de una camiseta de Harry y fui al baño a ponérmela. Me sobraba camiseta por todos los lados y tapa todo lo que tenia que tapar. Salí y Harry ya esta dentro de la cama, sin camiseta y suponía que también sin pantalones, de repente sentía como sobraba la camiseta
- ¿esa camiseta es mía?- pregunto Harry mirándome
- Si es que no encontraba mi pijama y me he adueñado de ella
- Me gustas como te queda, estas muy sexy, puedes quedártela, ahora ven aquí pequeña- me dijo Harry con una sonrisa. Me metí en la cama y me acurruqué a su lado apoyando la cabeza en su pecho – ya me a contado Zayn lo que han hablado él y Laura, no se como va a acabar todo esto, pero espero que no salga dañado, sentimentalmente digo- su comentario me hizo gracia y le dedique una pequeña sonrisa- ¿de qué te ríes tu?
- De nada- dije ya riéndome. Harry puso una sonrisa picara y comenzó a hacerme cosquillas- Harry para, por favor- dije entre risas – por favor- dije con lágrimas en los ojos- Harry por fin paró y se tumbó a mi lado- esto no quedará así- dije mirándole desafiante
- Eso esta hecho, pero ahora descansa que ha sido un día muy largo- me dio un suave beso en los labios y me acurruqué de nuevo junto a él, me quedé dormida en seguida.
A la mañana siguiente me desperté antes que Harry y bajé a desayunar. No se oía mucho ruido así que supuse que seria pronto y que el resto estaría durmiendo. En la cocina solo estaba Liam
- Buenos días Liam- dije mientras le daba un beso en la mejilla
- Buenos días- dijo con una sonrisa- eres la segunda en levantarse
- Algo raro en mi, ¿Qué hora es?- pregunté
- Las once y cuarto, a y media subimos a despertar a los dormilones- dijo con una sonrisa, su idea me gustó- con agua
- Me gusta la idea- dije riéndome
- ¿café?- me preguntó Liam
- Si- respondí a la vez que Niall que acaba de entrar por la cocina, se acercó y me dio un beso de buenos días
- A ti ni agua- dijo Liam entre risas
Desayunamos los tres y subimos a despertar a los demás. Liam despertaría a Danielle, yo despertaría a Harry y Niall a Zayn, cuando estuviésemos despiertos los seis iríamos a por Adam primero, luego Laura y Mark y por ultimo todos en familia a por Lou y El. Subí las escaleras con un vaso de agua bien fría para mi novio, entré en la habitación y lo vi dormidito como un bebé, intenté despertarle pero como no me hizo caso le tiré el vaso de agua por encima, rápidamente se levanto de un salto
- La venganza se sirve en plato frío- dije con un sonrisa de niña buena, me acerqué y le di un beso de buenos días
- Buena jugada- dijo con su voz ronca
- Vamos a despertar al resto
Fuimos de habitación en habitación despertando a el resto y casi todos estaban mojados porque no nos había hecho caso a la primera. Cuando llegamos a la habitación de Lou y El, Eleanor se despertó a la primera pero Louis no así que todos le tiramos un vaso de agua fría, fue sin duda el que mas mojado acabo.
Una vez que terminamos de recoger y que acabaron de desayunar los recién levantados decidimos tener el día libre y estar en la playa y en la piscina de casa, un poco de relax. Las chicas decidimos hacer la comida y fuimos a un supermercado cercano a comprar comida para hacer una receta especial de burritos de Danielle, mientras que los chicos se quedaron en la piscina de la casa.
Llegamos a casa y nos pusimos a hacer la comida, cogí mi teléfono para llamar a mis padres y cuando colgué un número desconocido me estaba llamando
(Conversación telefónica)
- ¡SARAAA!- no podía creer lo que estaba oyendo
- ¿Rebeca? ¿eres tú?
- Si tía- Rebeca era una amiga que conocía de toda la vida y que después de tanto tiempo seguíamos siendo amigas y lo mas bonito, las dos éramos directioners.
- ¿Qué tal te va todo? ¿Qué tal el verano?- me alegraba un montón oir su voz
- Pues súper bien y ¿a ti?
- También muy bien, no tengo queja- y tanto
- Te llamaba para darte un poco de envidia
- ¿a sí? Y ¿cómo?
- Estoy en la ciudad de nuestros chicos, ¡estoy en Londres! Estoy todo el verano en casa de una inglesa - no me lo podía creer
- ¿en serio? Yo también
- ¿Qué dices? Y ¿desde cuando llevas aquí? Ya decía yo que te notaba algo de acento- su risa sonó detrás del teléfono, esa risa que tanto había echado de menos
- Pues desde hace dos semanas mas o menos ¿tu?
- Desde ayer – decidí ocultarle lo de los chicos y darle una sorpresa- pues haber cuando quedamos, quiero verte
- Pues ahora estoy de vacaciones con unos amigos en un pueblo que no se ni el nombre, pero en cuanto vuelva te llamo y quedamos
- Perfecto, bueno me tengo que ir, ya hablamos, un beso hulka- así me llamaba cuando éramos pequeña
- Un beso Rebe
(Fin de la conversación)
Me fui hacia la mesa a comer con todos ya que la comida ya estaba preparada e iba levitando con una sonrisa en la cara. Hoy hacia un día estupendo, el sol brillaba con fuerza y comeríamos en el jardín
- ¿ y esa felicidad?- me preguntó Harry cuando me senté a su lado
- Me ha llamado una vieja amiga- dije con una sonrisa
Comenzamos a comer los burritos que estaban buenísimos y Laura y Mark estaban más cariñosos de lo normal pero yo estaba viendo como Laura lo estaba pasando mal por las caras que ponía Zayn cada vez que Mark la besaba. En uno de estos besos Zayn no pudo más y se levanto de la mesa y se metió dentro de la casa, a Laura se le quedó la cara pálida y salió corriendo detrás de él. Todos nos miramos y al parecer todos sabíamos de que iba la cosa, menos Mark que nos miraba pidiendo explicaciones, unas explicaciones que solo Laura le podía dar.

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