lunes, marzo 11

Sara (Capítulo 49)

Queridísimos lectores, ante todo pedimos disculpas. Hemos estado liadas con exámenes y esas cosas... supongo que lo entenderéis. Además estamos muy contentas porque hemos podido vernos la semana pasada, hablar cara a cara y no por teléfono como solemos hacer durante el año ha sido muy divertido, ya os lo contaremos. El caso es que han sido unas semanas intensas y emocionantes pero aquí estamos otra vez, con un nuevo capítulo de nuestra pequeña historia que os agradecemos que leáis y que esperamos que os guste y que disfrutéis leyéndola tanto como nosotras escribiéndola. Un beso enorme, y mil gracias por leernos, en serio.



La tarde pasó demasiado rápido. Susie poco a poco empezó a tranquilizarse, consiguió coger un poco más de confianza y al final parecía estar más tranquila. 
Laura, Zayn, Harry y yo nos despedimos de los demás a eso de las ocho y media y nos fuimos dando un paseo hasta nuestro apartamento con Noa en brazos de Harry
-¿os apetece una cenita esta noche?- preguntó Zayn y miró a Harry
-Claro- dijo Laura que iba agarrada de la mano de Zayn - ¿pero dónde?- preguntó curiosa
-El sitio no se puede decir, pero es un sitio elegante- dijo Harry mirando a Zayn y los dos comenzaron a reírse
-Vosotros dos tramáis algo- dije mirándolos. Se miraron entre ellos y negaron con la cabeza, Laura y yo decidimos reírnos y no darle importancia. Miré a Noa en brazos de Harry, estaba monísimo
-¿y qué hacemos con Noa?- pregunté cayendo en la cuenta de que solo no se podía quedar
-Dejarlo con Eleanor, parece que le ha caído muy bien, si ella quiere claro- dijo Zayn
-Es buena idea, luego la llamamos- dije sonriendo, me encantaba la idea
-¿y la cena tiene algún motivo especial?-preguntó Laura que seguía insistiendo para sacar algo más de información. Harry y Zayn se miraron, dudaron durante un rato sobre qué respuesta darnos y al finan contestaron
-No, ninguno en especial- dijo Zayn
-Bueno, en realidad sí, de despedida- Laura y yo nos miramos algo extrañadas
-¿de despedida?- pregunté
-Si, pasado mañana nos vamos a Paris ¿Recuerdas?- mierda se me había olvidado, el tiempo pasaba demasiado rápido y perfecto
-Claro que me acordaba, solo estaba gastándoos una broma- dije apartando la mirada
-Mientes fatal- dijo Zayn riéndose, algo que provocó la risa de todos
-Y es muy despistada- dijo Harry con una sonrisa- pero la quiero tal y como es 
-Ohh- dijeron al unísono Zayn y Laura, el rubor subió a mis mejillas y todos se rieron de mi
-Bobos- dije mirando al suelo
Llegamos al apartamento, nos despedimos de los chicos y quedamos en el London Eye a las diez. Subimos corriendo, teníamos una hora para las dos y antes teníamos que resolver con quien dejábamos a Noa. Decidimos que yo me ducharía primera mientras Laura llamaba a Eleanor para ver si se podía quedar con Noa, pusimos la música y me metí en el baño. Tardé tres canciones en ducharme y cuando salí Laura seguía hablando por teléfono
-Prefecto- dijo Laura- pues allí estaremos, un beso- y tras decir esto, colgó. Se giró y me miró
-Que rápida- las dos reímos- me ha dicho Els que sin problemas, que se queda con Noa, he quedado que pasábamos por su casa a las diez menos cuarto 
-Bien, pues vete a la ducha que no nos da tiempo- Laura se fue a la ducha y yo me fui a vestir.
Me puse una falda en tonos azules, amarillos, blancos y rositas, con un estampado raro pero bonito, una blusa blanca, mi cazadora vaquera, tacones amarillos fosforitos y la cartera a juego. Me hice una trenza a un lado de espiga que me llegaba hasta un poco más arriba del ombligo ¿me habría crecido el pelo? Me di un poco de maquillaje mientras Laura acababa de vestirse. Ella iba con unos pantalones cortitos negros con unas lentejuelas en tonos oro a los lados, una camisa del mismo color, unos tacones negros y cazadora de cuero negro, se había dejado el pelo suelto liso, estaba preciosa.
-¿estas lista?- le pregunté
-Cinco minutos, vete cogiendo a Noa y sus cosas- obedecí y cogí algo de comida por si acaso, uno de sus juguetes y la correa, lo metí todo en una mochila y llamé un taxi
-Laura, ¿estás ya? El taxi estará al venir
-Estoy- dijo cogiendo su bolso- vámonos. Salimos a la calle y el taxi ya estaba esperando
-Buenas noches ¿a dónde os llevo?- como no supiese Laura donde vivía Els íbamos listas
-Esta dirección- dijo Laura entregándole un papelito, la miré sorprendida- me la dio Els antes- las dos sonreímos y el taxi arrancó. Íbamos algo pilladas de tiempo, pero teníamos la esperanza de que la casa de Els quedase cerca
-¿está cerca la dirección señor?- pregunté al taxista, no me gustaba llegar tarde
-Sí, pero tardaremos algo más que hay algo de atasco- Laura y yo nos miramos desesperadas, estaba claro, llegaríamos tarde
A los veinticinco minutos de atasco llegamos a casa de Els, ya le habíamos avisa de que teníamos algo de prisa así que estaba en la puerta esperándonos. Me bajé yo del taxi con Noa y sus cosas, le di las gracias y me volví a montar en el coche. Teníamos cinco minutos para llegar al London Eye, así que le dijimos al taxista que se diese toda la prisa que pudiese y que nos dejase lo más cerca posible 
-No llegamos a tiempo- dijo Laura
-Si corremos sí- dije mirándola 
-¿con tacones?- preguntó Laura atónita 
-O descalza, como prefieras- Laura resopló
El taxista paró el coche y nos indicó por donde llegaríamos más rápido, pagamos y le dimos las gracias mientras salíamos del coche. Teníamos tres minutos, miré a Laura y negó con la cabeza yo le animé con la cabeza y comenzamos a correr. La gente nos miraba raro pero nos daba igual, miré atrás ya que yo iba algo más adelante que Laura
-No pienso correr más- dijo Laura- es matador correr con tacones
-Está bien- dije dándole la razón, a mí también me dolían los pies- pero andemos rápido- Laura asintió
Íbamos lo más rápido que los tacones y nuestras piernas nos permitían, miré el reloj, las diez
-Laura ya estamos aquí giramos la esquina y listo
-¿último esprín?- me preguntó, yo asentí y salimos corriendo, cuando llegamos al sitio no había nadie 
-No me digas que hemos corrido para nada- dijo Laura indignada cogiendo aire, respiré hondo
-En realidad no- dijo Zayn, Laura y yo nos giramos y vimos a Harry y Zayn, pero no estaban solos con ellos estaban Anne y Trisha. Enmudecí y me sonrojé. Laura y yo nos miramos sin saber qué hacer, estábamos muertas de vergüenza – Mamá esta es Laura, mi novia- dijo Zayn
-Y esta es Sara- dijo Harry presentándome a su madre, nos dimos dos besos de cortesía, no sabía que decir, los chicos nos la habían jugado pero bien
-Chicas puntuales, eso me gusta- dijo Anne rompiendo el hielo, todos reímos algo nerviosos
-Bueno,¿ vamos al restaurante?- dijo Trisha
-Claro- dijo Zayn. Cogí a Harry y fuimos un poco más atrás que los demás 
-¿cómo se os ocurre?- pregunté
-No sé, el otro día se nos ocurrió
-¿y por qué no nos habíais dicho nada?- volví a preguntar- que vergüenza… 
-Pensamos que sería divertido ver vuestras caras- le eché una mirada a Harry maldiciéndole y él se rio- tranquila, les caéis genial- me dio un beso y volvimos con los demás 
Llegamos a un sitio que tenía unas vistas preciosas de Londres, Laura y yo ya no estábamos tan cortadas y Anne y Trisha eran muy simpáticas 
-No sé qué le habéis hecho a nuestros hijos que los tenéis loquitos- Laura y yo reímos- no paran de hablar de vosotras, que si Laura, que si Sara… ya sentimos que os conocemos- dijo Anne
-Mamá eso no lo digas- dijo Harry 
La cena transcurrió tranquila, nos enteramos de algunas cosas de los chicos de cuando eran pequeños y alguna que otra trastada pero nos reímos mucho. Anne y Trisha eran muy agradables y tras la cena prometimos quedar otra vez. 
-Nosotras os matamos- dijo Laura una vez que estábamos solos los cuatro- ¿Cómo no nos avisasteis antes?
-Era una sorpresa- dijo Harry 
-Y menuda sorpresa, encima nosotras llegamos corriendo, que vergüenza…- dije indignada
-Bueno no ha sido para tanto, además queríamos que las conocierais, bueno ellas querían conoceros- dijo Zayn
-Está bien, está bien- dijo Laura
-Ahora tenemos que conocer nosotros a las vuestras, para estar en igualdad de condiciones
-Si ya las conocéis- dijo Laura- cuando fuimos a España…aunque no en las mejores circunstancias- un dolor agudo comenzó a golpear en mi pecho, Laura me miró- lo siento…
-No pidas perdón, se puede hablar de ello, aunque no sea bonito de recordar- Laura se acercó y me dio un abrazo
-¿estás bien?- dijo mirándome con esa mirada protectora suya
-Si- dije aun con un nudo en la garganta, ella me miró poco convencida- De verdad que estoy bien, ahora vamos a por un helado 
-Pues a por un helado se ha dicho- dijo Zayn, Harry se acercó y me acarició la mejilla, me sonrió y me apretó la mano, sonreí
-Yo quiero dos bolas- dijo Laura, mi mirada no se había apartado de los ojos de Harry, le di un suave beso dándole las gracias y volvimos al mundo
-Yo también quiero dos bolas- dije acercándome a Laura- y de chocolate.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por darnos tu opinión.

Nuestros lectores: